Modulación de la dieta
Yves Desjardins
Director del Instituto de Nutrición y de
Alimentos Funcionales.Universidad Laval.
Quebec, Canadá.
Conferencia
sustentada en el CINVESTAV-Mérida.
Yves Desjardins |
Voy a hablarles de la micromateria en el
intestino y cómo se relaciona con el metabolismo de grasas, con el metabolismo
de energía y cómo impacta a la diabetes y a la obesidad.
Cuando hablamos de nutrición, hoy en
día, necesitamos usar muchas técnicas, por eso es importante usar la
investigación multidisciplinaria. Y es importante añadir: con un buen
conocimiento de fitoquímica, de microbiología, de metabolismo y de otras
ciencias, todas integradas, se pueden entender mejor la obesidad, la diabetes,
las enfermedades metabólicas, por eso necesitamos compartir conocimiento y creo
que el propósito de nuestra plática es compartirlo con otras disciplinas para avanzar.
Así que voy a hablar de tres temas
durante esta presentación: voy a tomar un poco de tiempo para la etiología, en
el origen de diabetes y de obesidad, pero me gustaría mostrarles los resultados
que obtuvimos con polifenoles de frambuesas sobre la diabetes. Esto será un
ejemplo de cómo utilizar polifenoles de frutas para curar y prevenir
enfermedades metabólicas.
Luego
hablaré del papel de estas moléculas de frutas y vegetales en los intestinos,
de mucha importancia para nuestra vida: la microbiota, esos microorganismos en
perfecta simbiosis con nosotros que explican algunos de los resultados
observados en nuestro organismo.
Obesidad
Nuestra forma de vivir es “tóxica”,
ustedes lo saben, tenemos mucha tensión y esto modifica nuestra forma de
digerir la comida. Comemos demasiado, mucha grasa, demasiados carbohidratos y
todo esto nos lleva a una crisis de obesidad.
En Estados Unidos, algunos estados tienen hasta un 30% de su población en situación de obesidad y, de acuerdo con el elevado número de incidentes de diabetes de tipo 2, es una de las enfermedades con más impacto y más problemas para el futuro.
Solo para que tengan algo de datos. En Canadá, en Quebec tenemos como el 17% de personas obesas, esto es un Indice de Masa Corporal (IMC) de más de 30, muy elevado. En los Estados Unidos, es de un 32% y México está alrededor de esta cifra. Es realmente una crisis que ya ha llegado a ser mundial. En China, la obesidad ha comenzado a ser, también, un gran problema.
Mientras se incrementa el peso y tienes más de 35 de IMC, tus probabilidades de tener diabetes tipo 2 son muy altas, así que necesitas encontrar solución a este problema. Uno de los impactos de la obesidad en el metabolismo general, es un estado general de inflamación y no voy a ir a lo profundo, solo quiero que recuerden la importancia de la presión inflamatoria en el desarrollo de enfermedades.
Si alguien es delgado, tiene un nivel normal
de tejido adiposo. Pero en una etapa con nutrición deficiente, con muchas
grasas en tu nutrición, inducirás un estrés en tus tejidos adiposos y también a
muchos periféricos. Este estrés causará una respuesta inflamatoria y esta
respuesta inflamatoria producirá abundante óxido nítrico que se convertirá en
un círculo nocivo de respuesta inflamatoria.
Cuando
este círculo nocivo empieza, recuerden que nuestro tejido adiposo es un sistema
endocrino (glandular), responderá produciendo hormonas y desbalanceará por
completo el metabolismo. Lo importante es que mientras te vas poniendo obeso,
tendrás mayor presión inflamatoria.
Los polifenoles y sus beneficios
Yo soy fitoquímico, trabajo con
polifenoles para incrementarlos en las frutas y verduras. Espero, después de
esta plática, convencerlos de comer al menos 5 porciones de frutas y verduras al día, porque contienen
polifenoles.
Los
polifenoles forman una compleja familia de moléculas. Hay unas 10,000 especies
moleculares de polifenoles, la mayoría se encuentran en las frutas y verduras,
en porcentaje muy elevado. Tú y yo
estamos, probablemente, consumiendo de 2 a 3 gramos de polifenoles en nuestra
dieta, lo cual es mucho.
Consumimos polifenoles cuando tomamos vino,
el resveratrol es una de las moléculas que encontramos en el vino,
muy buena para la salud.
Lo consumimos mucho al ingerir café, es una fuente primaria de
polifenoles,
pero también lo consumimos en nueces, almendras, arándanos,
frambuesas y en el pan, de igual manera.
Pueden
tomar muchas formas: algunos son muy simples, pueden ser absorbidos sin
dificultad, algunos son mucho más grandes, llamados proanto-cianidinas,
escuchamos y oímos de trímeros de proanto-cianinas, así que hay 3 unidades de
esto para esta molécula. Pero si comes arándanos o frambuesas, un tercio de
todos los polifenoles que consumes son proanto-cianinas y no son trímeros, son
pentámeros, decámeros puedes tener hasta 30 unidades y en el polímero son
enormes moléculas, y ya que son enormes no son absorbidos, van directamente al
intestino y son alimento para tus bacterias.
Sabemos
ahora que comer frutas y verduras es bueno para nuestra salud. Es una comida de
baja energía, mejorará tu nivel de saciedad y mejorará o reducirá la cantidad
de comida de alta energía que necesitemos. Pero además de eso, los polifenoles
que contengan, permitirán tratar o curar un número de enfermedades
interrelacionadas y sabemos que si consumimos la cantidad diaria necesaria de
verduras y frutas podemos decrecer las enfermedades cardiovasculares, en
algunos casos modulará el señalamiento en cascada y en alguna medida reducir al
cáncer.
También
puede estimular la capacidad de reducir el estrés oxidativo, puede reducir la
respuesta inflamatoria en diferentes tejidos, puede hacerte más inteligente,
prevendrá el decaimiento degenerativo. Pero lo que voy a hablar aquí , es el
rol de frutas y verduras en: diabetes,
reducción del síndrome metabólico, reducción de la tolerancia a insulina y
reducción de la tolerancia a glucosa.
Polifenoles o antioxidantes
Hemos llamado antioxidantes a los
polifenoles y podemos verlo en los empaques de yogurt y otros productos. Ahora
bien, en nuestros días no hemos considerado a estas moléculas por su potencial
antioxidante. Ha habido un número de papeles y creo que la mayor parte de la
comunidad científica ya está básicamente diciendo que estas moléculas tienen
otra función, además de cambiar la capacidad antioxidante en el cuerpo o sea lo
que produce el envejecimiento.
La ciencia es como una tendencia y las tendencias cambian.
Así que en los 80´s hablamos de antioxidantes.
Luego del efecto antiinflamatorio de los polifenoles
y ahora de cómo pueden (los polifenoles) modular la micromateria.
Polifenoles y diabetes
Antes de explicarles cómo los
polifenoles modulan la micromateria, les daré los resultados recientes de una
prueba clínica grande que hicimos sobre el uso de frambuesas y de arándanos, en
el síndrome metabólico y en diabetes.
Hicimos
este estudio en un grupo de 60 sujetos. Les dije que consumimos como 3 gramos
al día, o sea 3,000 mg de polifenoles.
Si estas comiendo como una taza de frambuesas, entonces es una cantidad normal
de frambuesas para consumir. Así que lo que
hicimos fue un extracto de polifenoles de frambuesas y arándanos, el
equivalente a una mano llena de estas frutas.
Así que estos fueron los parámetros que medimos: sensibilidad de insulina o sea la capacidad del cuerpo de remover el azúcar del flujo de la sangre y esto distribuido a los órganos periféricos, músculos, cerebro, tejido adiposo.
Y la manera de medir la sensibilidad de insulina es aplicar la técnica “u gli se mec qui par sur de le mec glucose clan”. Lo que hacemos básicamente a nuestro sujeto es añadirle insulina en un brazo, para decrecer la cantidad de glucosa en el torrente sanguíneo, y en el otro brazo añadimos azúcar. Así que el nivel debe mantenerse estable.
Si
es resistente a la insulina quiere decir que necesitará menos glucosa para
mantener el mismo nivel, así que este es el criterio decisivo para medir la
sensibilidad a la insulina.
Medimos,
también, otros parámetros. El experimento fue relativamente simple: con un diseño
de brazos en paralelo. Así que adaptamos a nuestra gente por 2 semanas y luego
empezamos a alimentarlos por 6 semanas, comieron extractos de frambuesas y
arándanos todos los días por esas 6 semanas. Esto en sí, es un período corto.
Si
quieres cambiar tu metabolismo, no se trata solo de comer frambuesas esta tarde
durante el almuerzo. Se cambia a través del tiempo, de acuerdo a los cambios en
la microbiota intestinal, porque se tiene que cambiar su composición.
Hicimos
esto por 6 semanas. Tuvimos un control, un placebo perfecto, y nuestro
suplemento de extracto de frambuesa se lo dimos a una población de personas de
más de 40 años de edad, con algo de sobrepeso, medimos la resistencia a la
insulina y si eran medicados, estaban estables.
Vimos
que no había ningún impacto en el peso corporal, así que las personas no se
volvieron más delgadas. Entonces comer frambuesas por 6 semanas no es una
dieta, no se pierde peso. No cambia la presión sanguínea, aunque hay un estudio
que se hizo hace muy pocas semanas con arándanos que mostraba, si se consumían
estas frutas durante 6 semanas, que se podía reducir la presión sanguínea
significativamente.
No
hay diferencia, queremos ver cómo impacta a la resistencia de la insulina, a la
tasa de disposición de glucosa. Es una medida de cómo eliminar el azúcar de tu
torrente sanguíneo y cómo moverlo a los órganos periféricos. Lo que se pudo ver
durante las 6 semanas de tratamiento, es que pudimos mejorar significativamente
la tasa de disposición de glucosa en un 21% y si lo comparamos con el placebo
el porcentaje es, incluso, superior.
Una
droga para tratar la diabetes tipo 2, muy recomendada por médicos, se llama Ment
for men. Es una molécula de una planta que incrementa la tasa de eliminación de
glucosa en un 25%. Entonces, si comen frambuesas durante 6 semanas es casi el
efecto que pueden tener. Así se mejora la condición de glucosa en un grupo de
personas con síndrome metabólico.
Y
no olviden: si consumen frambuesas, arándanos, frutas y verduras, a cierto
nivel, así como los polifenoles, por al menos durante 6 semanas, obtendrán un
significativo impacto.
Mejora en el intestino
¿Dónde impacta? Puede lograrse
profundamente en el metabolismo y en la
fisiología, a nivel de tejidos adiposos y musculares, pero no mucha gente ve el
impacto de estas moléculas en el intestino.
El
microbioma, esta comunidad con más de 400 especies de diferentes bacterias, lo
tenemos en el intestino ahora mismo. Lo podemos modular si consumimos
probióticos enteros, como el yogurt que contiene bacteria viva, son la comida
de nuestras bacterias, y con frecuencia son polisacáridos solo digeridos por
tus bacterias.
Mi
pretensión es que los polifenoles son realmente prebióticos en cuanto a su
impacto en la reducción de grasa corporal, mejoramiento de resistencia a la
insulina, incremento a la tolerancia a la glucosa y reduciendo biomarcadores de
inflamación que es la característica más importante.
El
microbioma es popular estos días. No muy remotamente hubo un trabajo en Nature
que dice que tenemos 10 veces más bacterias en nuestro intestino que todas las
células de nuestro cuerpo y esto es como 2 kilogramos de microorganismos en
perfecta simbiosis con nosotros.
Controlamos
la naturaleza de las bacterias que hospedamos y ellos nos controlan en alguna
medida determinando nuestro nivel de saciedad, de hambre, lo que comemos, lo
que nos apetece y hasta nuestro humor.
Son
como 100 trillones de bacterias en nuestro intestino, muy importantes para el
desarrollo de la obesidad. Así, si comen mucha grasa como en la “dieta
Mcdonald’s” te volverás obeso y habrá un nivel alto de inflamación en los
órganos periféricos, en tejidos adiposos y músculos.
Si
comen prebióticos, en este caso la inulina (sustancia orgánica energética,
parecida al almidón, soluble en agua e insoluble en alcohol) de remolacha o de
agave, tendrán un incremento del nivel de bacterias buenas en el intestino y se
reducirá el nivel de algunas bacterias malas, ya que habrá cambiado todo el
metabolismo. O sea, se reducirá la inflamación de biomarcadores y de tejido
adiposos, mejorará la tensión en el intestino y se controlará mejor el apetito.
Todo
esto son resultados similares a los producidos por los polifenoles de las
frutas. Así que cuando se tiene una mala dieta, cambia la relación de dos
clases importantes de bacterias: las buenas bacterias, las bacteroidetes, y
otras malas, las formiquidades. Si tienen más de esta última clase de bacteria,
la bacteria será más eficiente para extraer energía de la comida y la
almacenarán como grasa. Así que si comen mucho tejido graso, comienza una disbiosis o sea el balance entre las bacterias
buenas y las malas se rompe y el metabolismo cambia por completo.
Dieta McDonald’s
Cuando las ratas comen esta dieta, vemos
que las bacteroidetes (bacterias buenas) se reducen en cantidad muy
importantemente y las formiquidades (bacterias malas) se incrementan, entonces
tenemos una disbiosis. Y cuando añadimos frambuesas a la dieta no cambiamos la disbiosis, pero tenemos una nueva especie que crece. ¿Qué ocurre? Esta especie está en la familia de la vilcromicrobia y tiene por nombre “aqar marcia municifila”, que en la literatura popular ha sido llamada la “bacteria antiobesidad”. Es “aqar marcia municifila” porque ama la mucosa, vive en la mucosa de tu intestino.
Nuestro colega Patrice Cani ha publicado un trabajo que muestra que
las personas obesas no tienen aqar marcia,
pero las delgadas sí tienen aqar marcia.
Sabemos
que aqar marcia está ahí. Sabemos también que decrece significativamente el LPS
(Lipo polisacárido) causante de la presión inflamatoria. Así que tenemos una
especie de solución y estamos empezando a entender cómo los polifenoles pueden
actuar al nivel del intestino para reducir la inflamación y eventualmente
reducir la presión.
Tienes
una comunidad de bacterias comensales que vive en el interior de tu intestino y
una clase muy específica de bacteria que vive en la mucosa. Así que en conexión
muy cercana al revestimiento interior de tu intestino, está la aqar marcia municifila
y consumiendo frutas y verduras con polifenoles incrementa la cantidad de aqar marcia,
pero en este momento no sabemos exactamente cómo.
Así
que por eso estamos haciendo una prueba clínica humana, para tratar de entender
cómo los polifenoles incrementan la aqar marcia.
Experimento
Así que hicimos una dieta para demostrar
como polifenoles pueden actuar sobre la microbiota intestinal y el experimento
es bastante sencillo, lo revisaré rápidamente: Le dimos una dieta vegetariana a
una parte de la muestra de ratones y a otra parte le dimos una “dieta
McDonald´s”, alto en grasa y en sacarosa, y a una última parte de la muestra le
dimos la misma dieta alta en grasa y sacarosa, pero incluimos algunas
frambuesas o sea polifenoles. La cantidad equivalente para humanos es de una
mano llena de frambuesas. Por cierto, publicamos estos resultados en “Gut” hace
6 meses.
Creo
que algunos resultados sobre ganar peso son
interesantes. Las ratas, con la dieta vegetariana ganan poco peso, pero
cuando le añadimos frambuesas no lo ganan y al reducir la cantidad de grasa
mejoramos la sensibilidad de las ratas a la insulina.
Así
que se puede ver una correlación entre los resultados de la prueba sobre humanos y el experimento con las
ratas.
En una pocas palabras, esto es un resumen de mi conferencia:
el 95 % de los polifenoles no son absorbidos y van a los intestinos,
modulan la microbiota intestinal, pueden incrementar el procesamiento de
nutrientes en el intestino, pueden incrementar la producción de mucosa,
estimular la aqar marcia municifila, reducir la inflamación de bajo grado y,
con esto, reducir enfermedades metabólicas.
Equipo multidisciplinario
Por todo lo que hemos abordado,
necesitamos tener un buen conocimiento de los polifenoles, su absorción, su
farmacocinética. Por eso necesitamos tener nutriólogos para hacer pruebas
clínicas, lipidólogos para ver los perfiles de lípidos, gastroenterólogos para
ocuparse de la inflamación gastrointestinal, necesitamos un equipo grande.
Así
que se requiere de todas estas colaboraciones, en varios campos del
conocimiento para avanzar en este curso de acción.
¿Qué son los probióticos y qué los prebióticos?
Probióticos- Son microorganismos vivos que se añaden a alimentos o que se presentan, por su modo de elaboración, en algunos productos alimenticios, como el yogur, al cual se inoculan lactobacilos para lograr el producto final. Sobre los probióticos podemos decir que estos llegan vivos al intestino y, junto a las bacterias presentes allá, mejoran el funcionamiento de este órgano y constituyen una excelente barrera de defensa que refuerza el sistema inmunológico.
Prebióticos- No son
organismos vivos, sino un tipo de fibra no digerible con efectos beneficiosos
sobre la salud al estimular el crecimiento de una clase específica de bacterias
del colon y de la flora intestinal. Los
prebióticos actúan junto a los probióticos, repueblan la flora intestinal y
optimizan sus funciones a favor de la salud de nuestro organismo.